Cesta de mimbre para bicicleta de adultos

Cuando adquieres la mejor cesta para bicicleta sientes como que te has quitado un peso de encima, ¡literalmente! Y es que no hay nada tan liberador como sacarse la mochila, colocarla en la cesta y descansar la espalda. Pero la inversión habrá merecido la pena siempre que sea una cesta que no termine por desgastar tu rueda trasera o delantera a la larga. ¡Ah! Y, claro, eso que nadie te dice: una buena cesta jamás te restará libertad de conducción o te hará pelear una y otra vez para poder dar una vuelta en U o girar en cualquier sentido.

Lo que tienes que mirar al comprar una cesta para bicicleta

Sí, puede que te pensaras que sólo era una simple cesta, pero como toda compra, mientras más y mejor informados estemos, mejor elección haremos, de manera que la cesta que escojamos tenga una larga vida útil y que realmente cumpla con la función que deseamos de manera óptima.

Instalación

Lo primero que necesitamos saber es dónde y cómo instalar nuestra cesta para bicicleta, con esto vamos a poder saber cuál es el sistema de montaje requerido. Cuando nos decantamos por una cesta delantera, el contacto visual con ella es constante. Si va en la parte posterior de la bici, necesitamos mayor seguridad en el montaje porque se nos hará más difícil saber si la cesta se desajusta, si se suelta alguna correa de sujeción o si el contenido se cae.

La cesta picnic es ideal para tu bicicleta. La enganchas con un clic, llegas a tu destino, la desenganchas con otro clic y la llevas contigo con su práctica asa.

Carga

El tipo de cesta ideal, da igual es si es más o menos, barata, estará determinada por el tipo de carga. Con esto también determinaremos la capacidad de carga que necesitamos. ¿Será nuestra cesta nuestro medio principal para cargar las bolsas de la compra o el medio de transporte de nuestros perros pequeños?

Durabilidad

La relación calidad precio es verdaderamente importante a la hora de comprar, pero cuando hablamos de una cesta para bicicletas, es bastante necesario prestar atención a la calidad de los materiales y de la construcción, en general, de la cesta. Pero también hay que decir que el peso y el tipo de carga que suele llevar la cesta determinará también si tiene, o no, una larga vida útil.

Pues, la mejor es aquella que cumpla con el propósito que le quieres dar. Sí, así de simple. Y es por eso que hay que tener en mente previamente cuál será el uso principal de nuestra cesta. Una cesta de metal, por ejemplo, no le será cómoda a tu mascota, pero será resistente para llevar la compra o la mochila del insti. Una vez tenemos esto resuelto, es momento de mirar aspectos de durabilidad y de tamaño, no queremos que nos dure lo que un suspiro o que se nos quede corta para todo lo que llevamos día a día.